El término ERTE ha cobrado especial relevancia en los últimos años, especialmente a raíz de la pandemia y las distintas crisis económicas que han golpeado a miles de empresas y trabajadores en España.
Pero, aunque es muy mencionado en medios y redes sociales, pocas personas entienden con claridad qué es un ERTE, cómo funciona y qué implicaciones reales tiene para el empleo, la empresa y la economía familiar. Este artículo te ayudará a comprender no solo el concepto, sino también su funcionamiento práctico, los tipos que existen, los derechos que protege, cómo se solicita y qué precauciones deberías tener en cuenta, ya seas trabajador o empresario
Contenidos del post
¿Qué es un ERTE en España y cómo funciona?
Un ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) es una medida legal que permite a una empresa suspender de forma temporal los contratos de trabajo o reducir la jornada laboral de sus empleados cuando existen causas justificadas.
Es decir, no implica un despido, sino una pausa o ajuste temporal en la relación laboral.
Su principal ventaja es que permite a la empresa adaptarse a situaciones críticas sin tener que extinguir los contratos permanentemente.
Un elemento clave que muchas empresas pasan por alto al activar un ERTE es contar con una póliza de responsabilidad civil empresarial, la cual puede proteger frente a posibles reclamaciones laborales derivadas de errores o conflictos relacionados con la aplicación del ERTE.
Porque el contrato suspendido por ERTE sigue existiendo jurídicamente, pero no produce efectos económicos ni de prestación de servicios mientras dura la medida.
Si la empresa opta por una reducción de jornada laboral, el trabajador percibe una prestación proporcional al tiempo no trabajado.
¿Qué tipos de ERTE existen y cuándo se aplican?
Según el artículo 47 del Estatuto de los Trabajadores, los ERTE se pueden aplicar por varias razones:
- causas económicas
- técnicas
- organizativas
- de producción
- de fuerza mayor.
Durante este periodo, el trabajador no acude al trabajo o lo hace por menos horas, y a cambio recibe una prestación por desempleo en ERTE gestionada por el SEPE.
Dependiendo del motivo que lo justifique, existen varios tipos de ERTE regulados legalmente.
Conocerlos es fundamental para entender si la medida está correctamente aplicada y qué derechos y obligaciones se generan en cada caso.
1.- ERTE por fuerza mayor
Se aplica cuando la causa que impide continuar con la actividad laboral es externa, imprevisible e inevitable (por ejemplo, desastres naturales, incendios, pandemias, cortes de suministro esenciales, etc.).
2.- ERTE ETOP (Económicos, Técnicos, Organizativos o Productivos)
Son los más comunes. Pueden aplicarse cuando la empresa sufre pérdidas continuadas, cambios tecnológicos, reestructuraciones internas o caída de la demanda.
3.- ERTE parcial
En lugar de suspender totalmente el contrato, la jornada se reduce (por ejemplo, de 8 horas a 4).
El trabajador combina trabajo y prestación por desempleo.
4.- ERTE voluntario
En ocasiones, empresas y trabajadores pactan voluntariamente una reducción o suspensión del contrato para evitar despidos.
5.- ERTE por causas estructurales o macroeconómicas
Recogido en la reforma laboral, permite activar ERTE ante crisis de gran escala sin necesidad de fuerza mayor específica
Diferencias clave entre ERTE y ERE
- La principal diferencia radica en que el ERTE es temporal, mientras que el ERE (Expediente de Regulación de Empleo) implica el despido definitivo de parte o la totalidad de la plantilla.
- El ERTE tiene como objetivo preservar el empleo; el ERE, reorganizar o reducir la estructura de personal.
¿Qué consecuencias legales tiene cada uno?
El ERTE no genera derecho a indemnización, pero sí garantiza la reincorporación del trabajador una vez finalice la medida.
En cambio, el ERE obliga a pagar una indemnización por despido, y puede implicar conflictos legales si no se justifica adecuadamente.
Derechos y condiciones del trabajador en un ERTE
¿Qué derechos tiene un trabajador afectado por ERTE?
Un trabajador afectado por ERTE mantiene todos sus derechos laborales:
- Antigüedad
- vacaciones proporcionales
- posibilidad de reincorporación
- acceso a la prestación por desempleo
- etc.
No puede ser sustituido, y debe ser informado por escrito del inicio, duración y condiciones del expediente.
¿Cuánto se cobra estando en ERTE?
El trabajador cobra el 70% de la base reguladora los primeros 180 días y el 50% a partir del día 181.
Este importe puede verse afectado por topes máximos y mínimos establecidos por ley.
Además, existen casos de subsidio por ERTE específico para trabajadores con bajos ingresos.
¿Cuenta como tiempo cotizado el ERTE?
Sí. Aunque el contrato esté suspendido o reducido, la cotización durante el ERTE sigue computando como si el trabajador estuviera en activo, lo que afecta positivamente a pensiones, prestaciones y otros derechos futuros.
Obligaciones, beneficios y riesgos para la empresa
¿Qué obligaciones tiene la empresa durante un ERTE?
Durante un ERTE, la empresa debe:
- Comunicar el ERTE a los trabajadores y a la autoridad laboral.
- Justificar la causa con documentación sólida.
- Respetar los plazos del ERTE y su duración.
- Tramitar las prestaciones en el SEPE correctamente.
- Mantener ciertos pagos a la Seguridad Social, según el tipo de ERTE.
En caso de incumplimientos, la empresa puede enfrentarse a sanciones o incluso a la anulación del expediente.
¿Se puede despedir después de un ERTE?
Sí, pero con limitaciones. Si la empresa se acogió a exoneraciones, deberá mantener el empleo durante al menos 6 meses tras finalizar el ERTE.
De lo contrario, puede tener que devolver ayudas y afrontar sanciones.
El despido tras un ERTE debe estar bien justificado y documentado, y siempre respetando la normativa vigente.
¿Cómo solicitar un ERTE y qué documentación necesita la empresa?
Para iniciar un ERTE, la empresa debe presentar una solicitud de ERTE ante la autoridad laboral competente. La documentación suele incluir:
- Memoria justificativa detallada.
- Cuentas anuales o informes técnicos (en caso de ERTE ETOP).
- Relación de trabajadores afectados por ERTE.
- Informe de la representación legal de los trabajadores (si la hay).
- Calendario previsto de aplicación.
La tramitación del ERTE puede hacerse online, a través de la plataforma del SEPE o del organismo laboral de cada comunidad autónoma.
Muchas empresas utilizan gestores o asesores externos para evitar errores.
También es importante considerar los casos siguientes especiales:
- En situaciones de baja médica y ERTE, la prestación puede ser suspendida.
- Las mujeres en maternidad mantienen sus derechos y prestación durante el ERTE.
- Los contratos temporales pueden incluirse si cumplen requisitos.
Si te has visto obligado a aplicar un ERTE en tu empresa, desde Galia podemos ayudarte a estar protegido frente a posibles reclamaciones.
Una correcta gestión del proceso, junto a un buen asesoramiento y seguros complementarios, puede marcar la diferencia ante cualquier inspección o conflicto legal.
Como ves, tanto si eres empresario como trabajador, entender cómo funciona un ERTE te permite actuar con más seguridad en tiempos de incertidumbre.
Y si estás gestionando uno, recuerda contar con una estrategia jurídica y documental sólida, así como herramientas como la póliza de responsabilidad civil empresarial, que pueden ofrecerte protección adicional.